Porque una cosa es adecuar, adecentar y facilitar el uso de senderos mediante su limpieza, mantenimiento y somera señalización en algún que otro punto conflictivo y otra bien distinta lo que cada vez es algo más que evidente, plagando el monte de pinturas, marcas y cintas, afeando, ensuciando y contaminándolo hasta decir basta. Y todo ello en un tiempo en que el acceso a la más diversa cartografía y sistemas de seguimiento de todo tipo están hoy en día al alcance de casi cualquiera.
Así las cosas, he podido constatar como en dos senderos dentro del parque natural del Estrecho, los amigos de lo fácil y sinsentido se dedican a mancillar alegremente el bien común, en este caso senderos dentro de espacios protegidos.
El primero de estos casos lo situamos en el sendero de la costa entre Punta Carnero(Algeciras) y Tarifa, ancestral camino que unía ambas poblaciones bañadas por las aguas del Estrecho de Gibraltar. Desde el inicio del mismo podremos comprobar cómo en apenas un kilómetro de distancia aparecen hasta una veintena de marcas de un estridente color amarillo, que podríamos asociar al camino de Santiago aunque de oficiales no tienen nada. Además en algunos puntos la posibilidad de pérdida es nula ya que este discurre entre la línea litoral y el monte cerrado. El video que os adjunto es la prueba gráfica del delito.
Para el segundo de los ejemplos, nos vamos a situar en el inicio del sendero oficial del Mirador de La Peña, ubicado en las cercanías del punto de información del parque natural del Estrecho y cerca de la población de Tarifa. Allí mismo parte-puesto que incluso hay un cartel con el nombre-el llamado sendero Buda, que hace relativamente poco tiempo fue así bautizado por nuevos senderistas-ciclistas. El caso es que ya desde este inicio-final podremos encontrar el mismo atestado de cintas textiles que de forma profusa "decoran" el recorrido, así como carteles, palos y todo lo que se les ocurra, ¡no se vaya a perder nadie por dios!. Estas cintas de tela no se puede decir que sean temporales para alguna prueba o evento puntual, pues ya se encuentran incluso descoloridas por el paso del tiempo. En este caso hay que añadir dos agravantes, como son el que se encuentran apenas a unos metros donde la guardería del parque transita, además de que en el sendero oficial la señalización-esta si oficial-mediante algún poste, se encuentra arrancada de su ubicación, precisamente en un punto de orientación dudosa...o sea, el mundo al revés.
Lo que no debe estar no lo eliminan y lo que debe estar no está...
Así que estamos apañados con estos nuevos decoradores de senderos con sus harapos y brochazos, cuando además de, la tendencia apunta hacia un sitio totalmente opuesto.
(También podéis dejar comentarios en nuestro canal de youtube bajo los videos)